Rasgando
el velo del misterio
Martín Peña Q. |
Me estoy
refiriendo enfáticamente a esa “otra parte” que quizás no sabes
de su existencia; aquella que de cierta manera has negado y la tienes
bastante rezagada, o peor aún, olvidada. Hablo de esa otra parte que
está leyendo contigo este libro también. ¡Ups! ¿Tienes miedo?
¡Ja, ja!, te digo, ¿ves cómo eres? No temas, que lo “desconocido”
no te va a hacer ningún daño. Por medio de estas líneas te ayudaré
a desentrañar algunos de los misterios que estuvieron velados por
mucho tiempo y que se programó a la humanidad para que se abstuviera
de indagar, que porque eso les haría libres, saaabees. ¿Qué te
parece si continuamos para rasgar por completo, y de una vez por
todas, el velo del misterio?
Podrás llamar a
esto que te ofrezco investigación psicológica, psíquica,
antropológica, o hasta espiritual; pero es bueno que sepas que es un
trabajo científico que me llevó años recopilarlo y contiene mucho
de física cuántica, medicina alternativa, autoconocimiento integral
y otras cosas más. Y para que te sientas de veras a gusto, te
anticipo que no te pediré que busques afanosamente algo que no vas a
encontrar. Nada de eso, por ningún motivo me atrevería hacerte
perder el tiempo. Esto que estamos emprendiendo juntos es más serio
de lo que te puedes imaginar, pronto lo vas a constatar. Y como sé
lo mucho que vales, te dedico esta obra con todo mi corazón. De paso
quiero expresarte mi respeto y admiración porque sé quién eres,
aunque tú todavía no te conozcas del todo.
Déjame decirte
que con asombro he descubierto que los limitados cinco sentidos
físicos no son muy fiables a la hora de darle imagen a la realidad
verdadera, porque el mundo que crees conocer es más virtual que
real. ¿Puedes imaginarte en el grave aprieto en que te encuentras?
Para mí eres más inteligente, más creativo y tienes mucha más
capacidad de conocimiento cuando estás dormido y soñando que cuando
estás despierto, ¿lo sabías? No, creo que no. Pero por algo se
empieza, ¿verdad? Con que sepas que no sabes ciertas cosas que
fueron alejadas de tu alcance y te las escondieron, con eso me basta.
Y es aquí donde se enciende un primer foco rojo, porque estas
declaraciones te pueden parecer en este momento ridículas por un
lado, o muy fuertes por el otro, pero, confío que cuando termines de
estudiar este trabajo completo te des cuenta que mis aseveraciones
tienen mucho sustento y al final se volverán irrefutables. Te invito
cordialmente a que no pares, tú sigue.
Lo
que te voy a transmitir posiblemente es algo novedoso y un tanto
cuanto espectacular, porque no es un tema que alguien más se haya
encargado de entregarte a lo largo de tu vida. Así como vayas
profundizando en la lectura de este valioso documento, te aclararé
muchos puntos oscuros que fueron distorsionados con el paso de los
tiempos por gente que así convenía a sus intereses. Ahora, quiero
destacar que estoy dando mi propia interpretación de los hechos,
porque toda información es descifrada y explicada por quien la posee
al entregársela a los demás. Así que, describiré la realidad del
medio ambiente que nos rodea de la manera que lo conozco. También te
brindo parte de mis vivencias en otros niveles de consciencia y
dimensiones que existen en el espacio-tiempo, y que tú no te habías
dado permiso creer que vibran
al unísono con el escenario exterior conocido. ¿Estamos?
Soy alguien que
te trae un mensaje diferente al del mundo que piensas que conoces.
Más adelante te contaré parte de mi historia, aguántame tantito.
Por ahora quiero hablar de ti. Toma en cuenta que desde que llegaste
a este planeta naciste y creciste dotado de una peculiar
característica que te diferencia de las demás especies. ¿Que cuál
es ese legado tan importante al que hago referencia? ¡Pues que
posees la asombrosa habilidad de proyectar tus pensamientos y
convertir éstos en formas físicas! ¿Quieres más? Así de
“poderoso” has sido desde el principio de los tiempos. ¡Eres
único en tu género! Por eso y por muchas cosas más te digo que te
admiro y te respeto. Pero, me asalta una duda: si eres dueño de todo
ese talento, ¿por qué no le has sacado provecho? ¿Es que no te has
dado cuenta que lo tienes, acaso? ¿Por qué te has dejado convencer
de que eres un ‘don nadie’?
Éste trabajo
sin precedentes viene a ser la punta de lanza que encenderá las
antorchas dispuestas a alumbrar el brumoso camino con que te
enfrentas todos los días en el largo peregrinar de tu vida. Con
gusto te mostraré de manera precisa cómo masterizar tu conciencia
superior con tu mente y corazón para que entiendas a fondo los
conceptos que plasmo con amor al interior de este bello tratado
multidisciplinario. De una buena vez me disculpo contigo por si en
algo no coincide la información que te entrego con la que se
encuentra en tu preciado intelecto, ya que mi única intención es
aportar lo que me toca para que termines conquistando una verdadera,
real y duradera apertura de consciencia. No es nada más, ni nada
menos tampoco…
Por mi parte
siempre recibirás la suficiente cantidad de elementos que te
conducirán a la integración y realización total de tu persona, de
eso que no te quepa la menor duda. Si me permites, daré inicio a una
serie de declaraciones que ya no puedo seguir guardándomelas.
Durante toda mi vida estuve esperando el mejor momento para
transmitirte esto y creo que la fecha llegó. La humanidad ya maduró,
ya está preparada para asimilar estas cosas y por fin yo cumpliré
con mi promesa de compartir lo que sé respecto al origen de la raza.
¿Empezamos?
Con tu venia
quiero decirte esto: Hace mucho, pero mucho tiempo, elegiste venir a
este mundo para interactuar con él, nomás que no te acuerdas.
Sabías muy bien todo lo que el planeta te ofrecía para tu propio
desarrollo concientivo. Se te hizo del conocimiento que la Tierra es
una escuela de aprendizaje como pocas y bastante animado corriste a
enlistarte para venir a cursar un grado más alto del que ostentabas;
quisiste hacer acá tu maestría; en ‘la escuela de la vida’.
¿Existirá alguna reminiscencia de ese valiente pero a la vez
impulsivo y arriesgado acto en tu memoria celular? ¡Por supuesto que
sí!, y muy pronto te quedará clara esa situación, ya que yo me
ocuparé de hacértelo recordar…
Entonces, como
te decía, en tu interior sólo bullía la sensación de que
concluyendo con esta no menos dura y larga, pero fructífera estancia
en estos inhóspitos dominios, almacenarías una vasta experiencia
que te conduciría a niveles tan refinados de consciencia que cuando
regresaras a tu terruño querido, allende las fronteras,
completamente fundido con tu Ser multidimensional, se ofrecería una
gran fiesta en tu honor. Y no te equivocaste, te aseguro que también
te entregarán “las llaves de la ciudad” en reconocimiento a tan
grande proeza. Te lo digo porque sé. Muchas veces he estado presente
en ceremonias de graduados y a todos les ponen insignias en sus
trajes y les hacen enormes recepciones con música y todo.
Sirviéndote
de las enseñanzas que pongo a tu entera disposición, más pronto
que tarde lograrás todos los objetivos que te trazaste en ese
compromiso con el destino multidimensional. Es hora que termines ─¿o
inicies?─ con la labor que tú mismo te echaste a cuestas. Por
donde le busques, vas a tener que cumplir con ese desiderato cósmico.
Entiéndelo bien, tú eres un gran Ser de luz que se sometió
libremente a usar un disfraz para actuar en una obra de teatro; y no
me digas que no escogiste el mejor de los papeles: ¡el de “ser
humano”! Hoy por hoy estás involucrado “hasta el tope”,
jugando tu juego: “El
juego de la Vida”.
Porque la vida es un juego y nunca dejará de serlo.
Pero
hasta cierto punto te veo absorto, enajenado, agrio y cansado, porque
te has tomado muy en serio o muy a pecho tu papel. De todos modos, te
felicito porque eres demasiado bueno frente a las cámaras. ¡Pero ni
siquiera sabes que te están grabando!, y tampoco te das cuenta que
eres visto por millones de seres en otros planos, entre ellos toda tu
familia cósmica, los cuales con mucho interés siguen de cerca tu
actuación las veinticuatro horas del día y los trescientos sesenta
y cinco días del año. En otras palabras, en cada una de tus vidas
eres el actor principal de tu propio drama, comedia o tragedia ─¿en
cuál crees que encajas?─ que se monta en el set cinematográfico
más grande que jamás se haya conocido en el universo y que se llama
planeta Tierra. Porque has de saber que esto que está ocurriendo
aquí es algo inédito. Es el experimento más novedoso que hay: ver
actuar a los humanos batallando con las polaridades del bien y del
mal para ver cómo crecen en consciencia.
Los que te
rodean también están en el reparto contigo y nadie les explica
nada. ¿Por qué crees? En parte se les dejó solos para ver los
recursos de improvisación con que todos cuentan. Pero, no te
preocupes, tú así lo quisiste. Sabías exactamente a lo que venías.
Bueno, déjame hacer una acotación: lo tenías claro al principio,
pero con el paso del tiempo ¡se te olvidó! ¡Qué tragedia la tuya!
Si aguardas pacientemente te iré haciendo recordar poco a poco; ya
que toda la información está celosamente guardada en tu interior, y
como soy conocido en el argot cientifista como el “maestro de la
intercomunicación”, creo que estás en buenas manos. Sólo tenme
un poco de paciencia.
Te
adelanto que, otro segmento del plan consistía en ver cuánto tiempo
te tomaba recordar que estás actuando en tus películas, que son tus
propias vidas, y sin apuntador, sin guión y sin nada. ¡Wow! Así
que, nada más estabas esperando la señal para parar de tajo el
seguir actuando de manera inconsciente y pudieras quitar la gruesa
venda que cubría tus ojos. Ahora jubiloso te lanzarás a terminar la
portentosa tarea por la que encarnaste en esta inigualable escuela de
instrucción superior ─¿acaso dije “academia de actuación”?─
que es la Tierra. ¡Bien por ti! Ah, pero no vayas a pensar que estoy
delirando, ¡nada de eso! Más tarde te diré cómo le hago para
saber lo que sé, ¿sale?, ya falta poco.
Mientras
tanto prometo que te ayudaré a usar el máximo poder de tu
pensamiento, el cual, combinado con la energía especial que está
rodeando en estos tiempos el planeta te servirá para que lleves a
cabo los trabajos que necesitas hacer. Aquí aprenderás a utilizar
la inigualable fortaleza que hay en tu corazón mientras te abres
mentalmente a las posibilidades infinitas de lo desconocido. Con la
mente abierta llegarás mucho más lejos en el camino sabiendo que el
poder del universo también te ampara. Aprovecha la capacidad que
tienes de usar el vasto reino de las posibilidades infinitas; ¿por
qué insistes en limitarte a lo que ya conoces? Es mejor que te
expandas más allá de tus metas actuales; con seguridad te
sorprenderás de lo que se presentará ante ti.
Hablando
acerca de la verdad, ésta es muy relativa. La famosa “verdad”
es única y exclusivamente lo que a uno le consta. Es «lo que uno
sabe» en realidad; y lo que no se sabe, pues no es una verdad, así
de simple. Si alguien te dijera, por ejemplo, que Tokio es la capital
de Japón, puede que lo diga porque ya estuvo físicamente en ese
lugar... si no, entonces está faltando en parte a la verdad. En caso
que ese fulano te demuestre que realmente viajó a Tokio, Japón, esa
sería su verdad. Pero, ¿es tu verdad? Porque no lo será mientras
no hayas pisado ese punto geográfico y no hayas experimentado en
carne propia esa realidad. Hasta que no sepas lo que se siente
transitar por las calles de esa bulliciosa urbe, para ti no será una
verdad.
Quizás des por
sentado que esa ciudad es la capital de aquel país porque así lo
creíste cuando te fue transmitido en la escuela secundaria, pero,
eso no deja de ser mera filosofía, como la mayoría de las cosas que
hay en tu vida. Tu cerebro puede estar rebosante de conocimientos
teóricos que un día creíste que eran verdad, pero, qué tal si no;
¿ya los experimentaste? Quizás ni siquiera sean verdades de la
persona que te los enseñó. Mucho de lo que hay en tu bagaje
intelectual puede no ser más que memoria o conocimiento adquirido.
La verdad es únicamente de aquel que le consta lo que dice, porque
para él es un hecho y no una simple conjetura, una idea o un “dice
que se dice”. Toma en cuenta que tu conciencia es exactamente del
tamaño de tu verdad. ¿Entonces qué, bajo esa premisa, te consta
todo lo que dices que sabes? ¿O eres alguien que sólo repite lo que
otro más te vino a contar sin que siquiera les conste a ninguno de
los dos?
¿Crees que eres
consciente del mar de pensamientos que emites todos los días? Porque
la inmensa mayoría no lo es. El problema es que no controlas
siquiera la forma como hablas. Si pones atención a tu modo de pensar
verás que las imágenes o pensamientos que formulas con la mente
terminan siendo la base de tu vida diaria. Si a partir de ahora
reencaminas positivamente tus pensamientos (imágenes holográficas),
transformarás por ende tu realidad circundante, así de sencillo.
Cuando entiendas cómo funciona tu mente creativa, y lo lleves a cabo
verás cómo afecta de manera determinante la realidad. Al darte
cuenta que ayuda a cambiar tu vida, será evidente que te funcionará
para que lo apliques en la sanación integral energética, que entre
otras cosas también te enseñaré. Recuerda que no hay imposibles en
este mundo y tú eres el arquitecto de tu propio destino.
Pronto
te separarás de la ignorancia y te elevarás hasta sentir la brisa
de la libertad que se llama saber
interno.
En cuanto veas que tu pensamiento debidamente enfocado transforma tu
vida, disciplinarás tu manera de pensar y con eso ayudarás a
despertar a tu Ser dormido; te liberarás de las cadenas del oprobio
y experimentarás un indescriptible gozo. El verdadero deleite
consiste en que pronto seas amo de lo físico y no sigas siendo su
esclavo, pues tú eres quien ha creado cada cosa a lo largo de tu
vida. Eres el responsable de todo lo que has hecho, sea bueno o sea
malo. Fuiste tú quien decidió si era un éxito o un fracaso. Eres
el dueño de tu felicidad o depresión porque fuiste quien escogió
sentir de esa manera. Así fue y así ha sido siempre.
En cuanto sepas
que puedes cambiar esto, eso y aquello otro, a partir de ese momento
tu vida empezará a ser diferente. Pero, ¿cómo es que se da ese
proceso?; pues, de algún modo te tienes que dar cuenta que el poder
está en ti; que mora en tu interior y sólo espera que lo uses.
Escucha lo siguiente: si todo lo que piensas terminas manifestándolo,
entonces tu realidad es equivalente a las imágenes que creas con tus
pensamientos. Yo te pregunto: ¿qué quieres de la vida? ¿Qué es lo
que nunca has sabido? ¿Qué es lo que no has experimentado hasta
ahora? ¿Te interesa hacer conocido lo desconocido? Porque si estás
usando apenas el diez por ciento de tu capacidad cerebral, ¿qué
tendrías que hacer para activar el resto? ¿Y a dónde te llevará
todo ese potencial cuando lo conquistes? ¿Me lo puedes contestar?
En lo que son
peras o son manzanas, quiero que escribas una lista de todo aquello
que deseas hacer en tu vida, pero ahora mismo, no lo dejes para
mañana. Tu hermoso cerebro funciona con destellos de imágenes y
hologramas, y cada vez que piensas en algo, éste fulgura. Cada que
emites uno de esos destellos sucede algo para bien o para mal y
siempre termina afectando tu medio ambiente. Las muchas vidas que has
llevado en este plano dimensional se encuentran estancadas y esa es
la razón principal por la que continúas encarnándote. ¿Qué crees
que hay más allá de este lugar? ¿Habrá algo más por vivir, algo
más por ser, algo más por saber? Sí, sí lo hay, te lo juro. Pero
¿qué tendrías que hacer para entrar en una nueva línea de tiempo?
Lo primero es ¡que disuelvas tu pasado!, porque casi siempre
proyectas tu futuro basándote en tu pasado; y lo que te mantiene en
ese estado tan deplorable es la ignorancia, la culpa, la negatividad,
el temor y el miedo a cambiar. ¿Te parece poco?
Despertar
es que liberes tu naturaleza misma de las cadenas y limitaciones del
pasado. Pero, «¿cómo le puedo hacer?», te preguntarás. Es muy
sencillo, mira: Empieza por eliminar cuanto antes el ‘negro
historial’ de tu penosa vida. ¡Esa sí que es una verdadera
solución para muchos de los problemas que te aquejan! Como te decía,
tienes que dejar ahora mismo el andar contando una y otra vez tus
desventuras y enfermedades a los demás, porque si sigues actuando de
esa manera estarás fortaleciendo tus males y te harás vulnerable;
¿más?, me pregunto yo. Por favor ya no compitas con tus familiares
y conocidos para ver quién tiene más calamidades. Permíteme
enseñarte mejor la manera de destrabar tu computadora personal, o
sea, tu mente, por medio de una verdadera reingeniería de tu Ser;
por lo pronto te recomiendo que pienses en el amor y la alegría que
da la vida, así como la salud y la abundancia en todas sus facetas.
Elevando tu frecuencia vibratoria transformarás las energías
negativas en positivas y la armonía que necesitas retornará a ti.
De hoy en
adelante solamente pisa donde no haya más lemas ni códigos
equivocados ordenándote cómo vivir. Dirige tus pasos a donde no
existan etiquetas espiritualistas ni materialistas obligándote a
hacer corresponder las nuevas experiencias con lo que anteriormente
escuchaste de alguien más o leíste en textos antiguos ya caducos
por el paso de los tiempos. ‘Abrir los ojos a la realidad’ es
darte cuenta quién eres, para que tomes conciencia de tu máxima
verdad. Estas palabras son como semillas que estoy sembrando en tu
interior y vas a ver que un buen día despertarás rodeado de una
delicada y exquisita fragancia que te llenará de paz y sabiduría,
de mí te acordarás.
Algunos
reajustes que están ocurriendo en tu cuerpo y en tus emociones son
derivados de los cambios energéticos por los que la Tierra está
atravesando en esta etapa de transición. No trates de curar con
medicina física aquello que tiene su origen en las capas etéricas
de vibración porque de nada servirá. Una desarmonía energética
sólo se suaviza y resuelve por medio de la energía. Lo similar con
lo similar, recuérdalo. Cuida tu estabilidad emocional y
disciplínate, porque es la única manera de mantener la paz y la
tranquilidad en este periodo de cambio al que nos estamos acercando.
Ensaya
el silencio mental y practica la contemplación. En el despertar,
las huellas que uno va dejando en el camino son antorchas que
crepitan incesantes, son luces que alumbran el destino de otros que
vienen un poquito más atrás. Todos somos seguidores de la luz que
alguien más dejó como una guía. Rompe las cadenas de lo
establecido, reprograma tus nuevos esquemas por medio de esta
enseñanza y lánzate a conquistar tu propio destino. Ya no debes
esperar más…
¿Sabes
lo que sucede cuando te enfocas en algo maravilloso en tu vida?
Empiezan a desmoronarse muchas cosas que ya no servían y la energía
que las mantenía unidas se libera para que aquello que deseas pueda
iniciar la coagulación. Así que piensa y encuentra algo que desees
que te suceda. Pero asegúrate que esté dentro del rango de tu
aceptación y haz un dibujo de todos y cada uno de tus deseos.
Enfócate en lo que quieres cambiar de ti mismo; todo es posible. La
adicción al pasado no es permanente, te lo aseguro, es algo
temporal, bueno, eso digo yo, porque de ti depende. Enfócate en tu
carencia, dudas, enfermedades, cualquier cosa, y luego cámbialas una
a una por algo mejor. Anda, ¡tú puedes!
En
el momento que ves que todo se viene abajo ─energéticamente
hablando, porque le has retirado la energía del pensamiento─,
significa que has cambiado tu actitud sobre eso. Y en cuanto cambias
tu actitud sobre algo, lo quitas de allí; se destruye, se disipa, se
desmorona, se convierte en ruinas. El problema es que si mantienes o
evocas la misma actitud añeja que te molestó alguna vez, ésta
volverá a tomar forma, que te quede claro. Atiende lo siguiente: Con
la misma actitud que te enamoras y te vuelves loquito por aquella
persona a quien amas y le dedicas sesenta pensamientos por minuto,
rememorando siempre su imagen, con esa misma actitud te puedes
mantener enfermo, ¿lo sabías? Porque estarías piense y piense en
tu dolor y le estarías dando poder y más poder hasta que no haya
medicina capaz de curarte. Si me permites hacer otra comparación, tu
pensamiento es el clavo
que sostiene el cuadro que cuelga en la pared. ¿Captas la idea?
Siguiendo
con la misma tónica, los pensamientos son el pegamento
que une todo lo que proyectas como destello fulgurante que viene de
tu cerebro. Si vives una vida imprudente y escuchas todas las
advertencias que dicen que va a acabar con tu salud, así será. Con
la misma energía que se destruye algo, repito, con la misma, y no
con una nueva, también se puede evitar. Por ejemplo, al momento que
la mente cambia de parecer respecto a una enfermedad, la energía que
le daba poder se desmorona y se reanuda inmediatamente como salud
radiante. ¡Y todo lo hace la misma energía! Tú siempre has hecho
eso que te digo, nada más que al revés: de estar gozando de cabal
salud, al poco tiempo te estás muriendo, ¿cierto? Te digo que
tienes los cables cruzados, y hay que ponerlos pronto a todos en su
lugar…
He de precisar
que tus pensamientos son los que traen los cambios, porque éstos son
luz, y la luz es energía, y no me digas que no sabes que la energía
se convierte en circunstancias o materia, como lo quieras ver, al
cristalizar, finalmente, a tu alrededor, esa es una gran verdad. A
través de este bello conocimiento aprenderás que en cuanto los
pensamientos salen de tu mente, de forma instantánea se conectan con
la persona o acontecimiento que estés necesitando palpar o sentir,
porque todas las cosas se relacionan entre sí, desde el elemento más
pequeño hasta la forma más grande de vida en el universo infinito.
Este es el
momento idóneo, y lo estabas esperando, para que aclares todas tus
dudas, porque no podrás llevarlas más contigo. En el lugar a donde
nos dirigimos velozmente no hay espacio ni se da cabida a la
ignorancia ni miedos de ningún tipo. ¿Qué harás a la entrada de
esa zona si a cuestas llevas todavía ese pesado fardo de dudas y
temores?, porque ese tipo de vibraciones no son admitidas en aquella
región, ¿eh? ¿Te quedarás entonces en el mismo nivel que estás
sólo por aferrarte a tu antigua forma de pensar? ¿Quieres seguir
cargando tus miedos por todo el camino nada más para que te digan
que tus rechazos e incomprensión no pueden pasar? ¿O quieres
comenzar a trabajar para liberarte de los implantes de limitación
que te someten mientras haya tiempo?
Si es así,
prepárate entonces, déjame tomar tu mano y permíteme mostrarte el
camino que te llevará sin dilación hasta la salida del laberinto en
que estás metido sin saberlo siquiera. “¿En un laberinto yo?”,
pensarás en tus adentros. Sí, en un laberinto tú. Acepta que no
sabes muchas cosas que hay a tu alrededor; acepta que no sabes con
exactitud quién eres, de dónde vienes, ni por qué y para qué
estás aquí, etc. Te pido por favor que abras tu mente y tu corazón,
porque en esta electrizante aventura en la que nos embarcaremos
juntos, me esforzaré por revelarte algunas enseñanzas que jamás
imaginaste siquiera que existían. ¿Vienes, o te quedas?
¿No crees que
necesites ‘beber’ de la fuente del conocimiento puro para así
obtener la paz interna y que enseguida evoluciones? Sin la verdad en
tus manos y sin paz sólo lucharás por sobrevivir y nunca tendrás
tiempo suficiente para añadirle consciencia a las experiencias
almacenadas en tu vida. De repente caíste a un sueño profundo e
hipnótico y permitiste que gente ruin y déspota te condujera a una
vida de terror, esclavitud emocional y pobreza. Para que despiertes
de esa larga pesadilla te sugiero visualices una gran luz dorada,
como olas que vienen del mar hacia ti y te bañan, limpiando con eso
la oscuridad e ignorancia a la que fuiste sometido por tanto tiempo.
Con el paso de
los años he constatado que una de las peores enfermedades que padece
el ser humano es la desinformación, refiriéndome enfáticamente a
algunas verdades que manejan a su antojo y conveniencia ciertas
instituciones y grupos de élite instalados en el poder. Al
percatarme de esa oscura realidad tuve los suficientes motivos para
entregarte, a través de este libro, información que te servirá
para entender el mundo que te rodea, para que sepas cómo y por qué
actúan de tal o cual manera los demás y, por supuesto, que termines
conociéndote mucho mejor a ti mismo tanto por dentro como por fuera.
Esta obra es una
guía o manual de procedimientos, es asesoría que te brindo en forma
de un diálogo amistoso, pues sé que se convertirá en un momento
dado en tu cuaderno de consulta. Has de saber que lo recopilé con
profundo amor; fue hecho especialmente para ti, por tanto, tómalo,
es tuyo. Estúdialo con mucha atención, pon siempre en práctica las
enseñanzas vertidas en él y disfrútalo cada vez que lo vuelvas a
revisar. Las frases aquí escritas son un compendio, como fruto de
las investigaciones que llevé a cabo durante mucho tiempo, teniendo
como modelo mi propia vida y la de los demás. Mi más caro anhelo es
alcanzar a tocar las fibras más sensibles de tu ardiente corazón.
Si de algo estoy
seguro es que tu mayor conquista en la presente existencia será la
libertad, y lo bueno es que en todos sus aspectos, por eso pretendo
conducirte a que la sientas con plenitud desde ya. Date cuenta que
una vez que experimentes tu propia independencia conocerás la
verdadera alegría de vivir. Sin estar vibrando desde una plena
libertad no puedes evolucionar como debes, y sin evolución, no le
das continuidad a tu preciado viaje. Aquí te voy a mostrar de forma
clara cómo vas a enfocar tu energía mental en la liberación y te
asombrarás de lo rápido que tu vida se transformará.
En otro capítulo
te instruiré cómo puedes gozar de una vida más larga a como la
conoces hoy en día. Esa longevidad te permitirá aplicar las
lecciones más conscientemente y podrás exprimir el verdadero zumo
de la enseñanza que te han dejado tus experiencias vividas. Cuanto
más alargues tu vida mayor cantidad de vivencias atesorarás, las
cuales te servirán para ir directo a la integración con tu Ser.
¿Sabías que viniste desde las dimensiones superiores con una misión
que estás a punto de recordar? Hoy por hoy tú eres la parte física
y mental de un hermoso ser de luz que vino a la Tierra a ayudar a
reunir a la humanidad en una gran familia.
Cuando sientas
el fuego crepitante del amor de tu corazón entenderás el propósito
por el que estás en este mundo y dejarás de creer en la separación
de tu esencia con la de los demás. Cuanto más cerca estés de tu
Ser experimentarás más plenamente la vida; y cuanto más
evoluciones, más aparecerán ante ti las posibilidades de
experiencias sin fin. No olvides que salirte de la rutina te
conducirá al crecimiento en todas sus facetas y ese desarrollo te
llevará a perfeccionar tu vida, porque superarás día con día los
nuevos desafíos que se te presentarán.
Pero te tengo
que repetir, no te podrás comprender a ti mismo ni vas a aceptar la
existencia de otras esencias hasta que no te deshagas de los
conceptos equivocados que alguien más te hizo creer. Muchos
conceptos que expongo en este trabajo sobre la realidad física te
resultarán sorprendentes. Debes tomar en cuenta que todo eso lo
percibo desde un punto de vista totalmente diferente al tuyo. Tú
estás ahora enfocado en la única realidad que conoces, preguntando
qué habrá afuera del tiempo y del espacio, y si es que hay algo,
mientras que yo he estado tanto adentro como afuera en incontables
ocasiones. Puedo ir y venir en tan sólo fracciones de segundo del
tiempo, al igual que tú, nada más que lo haces inconsciente o
durante los estados de sueño.
Tu Ser es el
receptor interno de la realidad que existe más allá de la
tridimensionalidad y lleva consigo el recuerdo de cada una de tus
existencias pasadas. Éste puede palpar las dimensiones subjetivas,
que son prácticamente infinitas y conoce el lugar preciso desde
donde fluye toda la realidad objetiva. A través de los canales
internos del Ser circula toda la información que necesitas para tu
despertar. Esa porción de tu identidad es bastante clarividente y
telepática de forma innata; es la que te avisa de los desastres
antes que estos ocurran aunque no aceptes conscientemente el mensaje,
y toda esa comunicación tiene lugar en menos tiempo del que te
tardas en emitir un solo juicio a los demás.
Los elementos
que aquí recibirás te ayudarán a encender antorchas de luz para
iluminar la oscura senda que te conducirá sin mayores tropiezos a la
meta final de tu cansado viaje. Date cuenta que estás parado justo
en medio de un interesante proceso que tiene que ver con la energía
del nuevo pensamiento del planeta, y aunque parezca el ‘frío
amanecer’ de un nuevo día, éste promete ser uno de los más
brillantes y hermosos en toda tu existencia.
Tu despertar
está muy próximo, y lo veo excelso, grandioso y extraordinario por
cualquier ángulo que se mire. Cuando concluya este hermoso recorrido
que iniciamos juntos, y lleguemos a puerto seguro, echarás un
vistazo atrás y advertirás con asombro lo que hiciste de ti. No
darás crédito a que hayas estado tan cerrado y limitado desde el
antiguo enfoque que tenías, porque te sentirás completamente
renovado.
Liberar quiere
decir: poder dejar ir; y aunque sé que tienes la tendencia a
aferrarte a todo lo pasado, te propongo que sigas adelante, porque tu
meta es que experimentes en carne propia la verdadera fusión o
integración contigo mismo. Al ir transmutando tus viejos moldes de
energía irás modificando tu propio destino; tu presente debe ser tu
pasado completamente sanado, y con eso virtualmente cambiarás los
potenciales de un mañana mejor, ¿a qué te suena eso?
Experimentar ‘lo
nuevo’ no es cosa sencilla de hacer, porque sólo los de corazón
fuerte logran buenos resultados. Los de ánimo débil se detienen a
un lado del camino para ver cómo los otros en su accidentado
recorrido van salvando una a una las pruebas que se les presentan, y
hasta se dan el lujo éstos atolondrados de juzgar a aquéllos
duramente. Reactivar los canales que te conectan con otras realidades
implica que te enfrentarás a nuevas percepciones muchas veces
imposible de ser explicadas a la luz de tu conocimiento actual; de
allí la importancia que afrontes los retos con una mente sincera y
dispuesta a lo que venga.
Estás entrando
a un terreno donde las teorías quedaron atrás, son letra muerta,
tiempo archivado, experiencias ajenas y opiniones vacías. Ahora
caminarás por tu propio pie sintiendo y vivenciando todo de una
manera distinta para que aprendas por medio de la experiencia real y
verdadera. Para que puedas percibir la nueva realidad tendrás que
desechar muchos conceptos que antes tenías. Para que pruebes de las
mieles de tu nuevo entorno pasarás por el proceso donde aún siendo
adulto te vuelves niño y ves con otros ojos lo que el universo te
ofrece, nada más que no compararás, no confrontarás ni juzgarás
como lo hacías antes; ahora simplemente observarás, experimentarás,
te extasiarás y vivirás como no lo habías hecho jamás.
Hay quienes se
resisten a entrar en su ciclo de auto-conocimiento porque no aceptan
la integración con su parte interna, ¿por qué? Porque no se
sienten merecedores de tanta belleza y piensan que necesitan sufrir
aún más. No saben que su Ser llegó a este plano en forma de luz
para experimentar cómo era estar dentro de un cuerpo físico
celular. La esencia vino a disfrutar del amor y la alegría, y de
paso a aprender cómo equilibrar la dualidad que le ofrece la escuela
de la vida. El Ser nació en este mundo porque quiso experimentar lo
no experimentado, vino a vivir lo no vivido y está aquí porque se
propuso hacer conocido todo aquello desconocido para él.
La energía del
sufrimiento y de la lucha interna proviene principalmente del hecho
que es difícil para muchos aceptar al yo humano y a la identidad
divina como una sola cosa, y piensan de sí mismos como algo alejado
y diferente de lo que es la Conciencia Cósmica Universal. En algún
tiempo permitieron que instalaran en sus mentes historias tales como
que sus antepasados habían llegado hasta aquí desterrados del
cielo, castigados por haber hecho algún mal; que su linaje era de
pecadores y debían esperar siempre por un salvador que viniera a
sacarlos de las profundidades del abismo, bla, bla, bla, bla. ¿Habías
oído eso antes? Claro que sí, y ¿sabes que existen instituciones
filosóficas y religiosas en la actualidad afectando más la
conciencia que ninguna otra cosa en la Tierra? ¡Acertaste! Y yo te
digo que si logramos producir cambios en dichas organizaciones, habrá
como consecuencia mayor apertura para que todos los que anhelan la
libertad puedan alcanzarla sin mayores dificultades.
Siempre he
pensado que este es un tiempo maravilloso para que empieces a dar lo
que le corresponde a los demás así como al planeta en el que vives.
Usa la energía e inspiración que están vigentes a tu alrededor
para convertirte en lo que has diseñado con el ojo de tu mente;
recuerda que tienes la habilidad de reunir tus pensamientos
rápidamente y convertirlos en materia o circunstancias, según lo
determines, ¡en un instante! No necesitas esperar que sucedan
cambios drásticos en tu diario vivir o en la Tierra para que
empieces con tu cometido, en lugar de eso utiliza tu misión para
empezar con los cambios; ¿no crees que sería lo mejor?
La semilla ya
fue sembrada en la quietud de tu mente. En el momento mismo en que
tomes control de tus pensamientos y tus sueños verás brotar el
fruto de los mismos ante tus propios ojos. Todo aquel que se ha
ofrecido en servicio al nuevo mundo ya se le entregó su mandato.
Escucha tu corazón y él te dirá por dónde y cómo empezar.
Espero aprendas
algo de la siguiente historia que te contaré; se llama: “Correr
riesgos”, y dice así: «Dos semillas estaban juntas en la tierra
sembrada. La primera dijo: ¡Quiero crecer! Quiero que mis raíces
lleguen muy abajo en el suelo y que mis retoños rompan la corteza de
la tierra que tengo arriba... quiero desplegar mis tiernos brotes
como banderas para anunciar la llegada de la primavera... quiero
sentir el calor del sol en mi cara y la bendición del rocío matinal
en mis pétalos. Y entonces creció…
La segunda
semilla dijo: Tengo miedo. Si dejo que mis raíces vayan hacia abajo,
no sé qué encontraré en la oscuridad. Si me abro camino a través
del suelo duro por sobre mí puedo dañar mis delicados retoños...
¿y si dejo que mis brotes se abran y una serpiente trata de
comerlos? Además, si abriera mis pimpollos, tal vez un niño pequeño
me arranque del suelo. No, me conviene esperar hasta que sea seguro.
Y entonces esperó… Un pájaro que andaba dando vueltas por el
lugar en busca de comida, encontró la semilla que esperaba y
enseguida se la tragó».
¿Qué se puede
rescatar como aprendizaje al conocer esa historieta? Seguro estoy que
va dirigida a aquellos que se niegan a correr riesgos y a crecer,
porque tarde o temprano son tragados por la vida. ¿Entendiste la
enseñanza? Espero que tú no seas de los indecisos. Atrévete a
enfrentar lo que te toca, porque si no, corres el riesgo de ser
“borrado del mapa”, y eso me imagino que duele… ¡Ay, ay, ay!
Por
último, ya entrado en las lecciones que da la vida, te comparto una
historia más, la cual lleva por nombre: “Teseo el renegón”. Y
dice: «Teseo era un campesino muy trabajador, pero si algo le salía
mal empezaba a renegar así: ─¡Maldición de las maldiciones
malditas!─ Y así se la pasaba, renegando, refunfuñando,
protestando y siempre malhumorado. Un día, muy temprano, Teseo subió
a su carreta y emprendió el viaje rumbo al pueblo. La mañana era
fresca y los pájaros cantaban. Todo parecía perfecto hasta que la
carreta se atascó. Una rueda se había hundido en el lodo del
camino. Entonces Teseo comenzó a manotear y maldecir, pero no hizo
nada para resolver el problema. De pronto, Teseo se acordó de Atlas,
un personaje muy poderoso que, según la leyenda, era capaz de cargar
el mundo en la espalda. ─¡Atlas! ─empezó a gritar Teseo─.
¡Ven y saca mi carreta del lodo! Ayúdame, por favor. ¡Tengo que
llegar al pueblo!─ Teseo estaba seguro de que Atlas llegaría para
ayudarlo, así que lo llamó y lo llamó hasta que el gran Atlas se
hizo presente. Teseo lo miró asombrado. ─¿Qué es lo que quieres?
─preguntó Atlas. ─Bueno ─comenzó Teseo, nervioso─, mi
carreta se atascó y no puedo sacarla yo solo. ─¿Así que no
puedes? ─dijo Atlas pensativo─. Está bien, te ayudaré, pero
debes hacer lo que te diga. Primero limpia el lodo de la rueda.
Luego, coloca tierra seca y piedras pequeñas frente a ella─. Teseo
obedeció, con la esperanza de que Atlas finalmente le ayudara a
sacar su carreta. ─Ahora ─continuó Atlas─, toma ese tronco y
ponlo detrás de la rueda. Arrea tu caballo y cuando la carreta se
mueva, empuja el tronco─. Teseo arreó su caballo y cada vez que la
rueda se movía, él empujaba un poco más el tronco. Así, poco a
poco, la carreta salió del lodazal. ─¡Gracias, Atlas!, sin tu
ayuda mi carreta aún seguiría atascada. ─Pero si fuiste tú quien
hizo todo ─señaló Atlas─. Sólo deja de renegar y piensa cómo
solucionar tus problemas. Tú no me necesitas─. En ese momento
Atlas desapareció tan misteriosamente como había llegado. Teseo
continuó su camino hacia el pueblo. Desde ese día reniega menos y
trata de resolver sus problemas sin maldecir ni refunfuñar».
¿Cuál crees
que sea la moraleja del cuento? ¿Con qué personaje te identificas?
¿Eres Teseo, o acaso eres Atlas? Bueno, en realidad te compartí esa
hermosa historia porque resulta que hay muchos ‘Teseos’ en el
mundo que manotean y maldicen cuando tienen problemas pero no hacen
nada para salir del bache en que están metidos, quieren que otro
venga y les resuelva su vida. Mi trabajo como profesor y sanador ha
hecho que en mi camino me cruce con un gran número de personas que
sólo saben pedir y pedir, ándale, acertaste, se comportan igualito
que Teseo… Hay quienes me exigen a gritos y sombrerazos que los
cure o atienda a un familiar o amigo suyo. ¿Y sabes qué? Yo siempre
actúo como Atlas; me encanta esa filosofía.
Ciertamente
tengo muchas herramientas qué ofrecerte; si te das cuenta, eso es lo
que estoy haciendo, y con mucho amor. Pero has de saber que yo no voy
a resolver tus problemas. Mejor te enseño a que los enfrentes para
que crezcas por ti mismo. Te doy la mano y te ayudo a caminar, pero
una vez que lo dominas y lo sabes hacer tú solito, te suelto para
que experimentes la libertad y vayas hasta donde quieras llegar,
porque el límite lo pones tú y nadie más que tú.
Que te quede muy
claro: ninguno debe cargar la mochila de otro. Todos llevamos cierto
peso sobre nuestros hombros y no es justo echarse a cuestas la carga
de los demás. Toma en cuenta que en vez de hacer un bien a tu
prójimo terminarás perjudicándolo. No sólo sacies su hambre en
este momento, enséñale mejor a conseguir su propio alimento y así
subsistirá por más tiempo. No nada más ofrezcas pescado al
hambriento, instrúyelo para que sepa pescar. Muéstrale con
paciencia y amor cómo puede lograr la autosuficiencia. Entrega la
ayuda consciente desde tu corazón a todos con quienes entres en
contacto. Esa es la llave del éxito.
La
vida es la alegría suprema y el deleite de experimentar Todo
Lo Que Es.
¡Anímate a vivirla!